Encuestas de Intención de Voto municipal. ¿Cómo se realizan?

Actualización Julio 2015 al final de la página

 Desde "PolíticaCrevillent" realizamos sondeos sobre la situación política y la intención de voto en nuestra localidad.

Al no disponer de recursos económicos ni humanos que posibiliten la realización de las encuestas de forma telefónica o presencial, la recogida de datos se realiza a través de un formulario configurado que se distribuye por Internet mediante nuestra página y las personas que comparten el formulario entre sus conocidos, hasta llegar a una muestra estadística lo suficientemente grande que permita poder tratar los datos recogidos en el formulario.

Por el método de recogida de muestras, el resultado en bruto obtiene un sesgo pronunciado que sobrerrepresenta a las posturas políticas movilizadas y penaliza las menos movilizadas, además, pese a la invalidación de envíos duplicados, nunca se pueden descartar envíos "organizados" o especialmente sesgados hacia una formación política.

Estos problemas se solucionan en dos partes:

1- Invalidando los resultados sospechosos

Consiste en no tener en cuenta envíos similares en contenido y tiempo que, pese a provenir de distintos equipos, podrían obedecer a un envío organizado a favor de una opción.

2- "Cocinando" los datos

Cocinar es una forma popular de referirse a la modificación de la estimación de voto teniendo en cuenta otros factores obtenidos en el formulario con el fin de reducir el sesgo producido por el método de recogida de datos. Estos son, de forma principal, el Recuerdo de Voto y la Simpatía a partidos.

En este ejemplo podemos observar cómo en los datos obtenidos en una hipotética encuesta, el Recuerdo de Voto obtenido para los partidos políticos no es igual a los resultados que realmente obtuvieron en las urnas (% sobre el censo)

Para solucionar este problema debemos adecuar la intención de voto con una corrección entre los porcentajes que realmente obtuvieron en las urnas y el recuerdo de voto declarado, eliminando así la sobrerrepresentación del "Partido A" y "B" y corrigiendo la infrarrepresentación del "Partido C".

Así obtendríamos un resultado corregido a la totalidad del censo y a partir del cual realizamos una proyección electoral.



No obstante, en el contexto político actual, las correcciones matemáticas no son las únicas que se han de llevar a cabo para poder obtener un resultado más o menos fiel a la realidad del momento en el que se realizan.

Existe un llamado "voto oculto", es decir, personas que pese a votar a un "Partido A", no lo declaran y su voto pasa, mayormente, a la opción de indecisos.

Este problema se soluciona en parte derivando su simpatía hacia el voto declarado

Así pues, la respuesta del entrevistado X, pasará a computar como voto al Partido A.

Como corrección mayor o "conservadora", también preferimos derivar al resto de indecisos sin simpatía declarada entre las dos opciones mayoritarias en un porcentaje 70/30.

Esta parte de la cocina es realmente subjetiva y expuesta a errores, pues no deja de ser una corrección artificial en base a una hipotética respuesta no cierta del entrevistado.


Tras toda la cocina, se deberá adaptar la estimación a un supuesto de participación, que en Crevillent se ha solido mover entre un 72-76%, a partir del cuál obtendremos el número de votos a cada opción y del cual obtendremos una proyección de ediles para el Ayuntamiento. Tampoco se debe olvidar el porcentaje de voto en blanco que variará de forma leve el porcentaje de voto válido para cada partido.


Desde Julio de 2015 disponemos de una muestra estadística privada invariable que ha sido puesta a diversas pruebas para poder estimar su sesgo y producir estimaciones de voto a partir de ella. Con éste método se eliminarán variaciones pronunciadas de una encuesta a otra debida al cambio constante de la muestra y se evitarán acciones organizadas a favor de una opción política que pudieran sobrestimar su proyección artificialmente como nos tememos ocurrió hasta entonces. Éste método experimental y plenamente online se realiza a través de la aplicación de mensajería Telegram, a partir de la cual, los inscritos reciben un cuestionario privado que responderán y cuyos datos se volcarán a un archivo de formato Excel con el objetivo de ser tratados. El principal problema con el que trataremos será el pequeño tamaño de la muestra, ya que con el objetivo de conseguir una muestra independiente y libre de intoxicaciones, no hemos conseguido una base de inscritos lo suficientemente elevada. Aún y así, consideramos que los sondeos deben seguir siendo publicados.